Niño con arma de juguete en escuela de Victoria es un llamado de alerta: Provida

Por José Gregorio Aguilar

Cd. Victoria, Tamaulipas.- El delegado de Provida en Victoria, Francisco Joel Rodríguez Domínguez advirtió que lo que ocurrió en la escuela primaria  Altaír Tejeda de Tamez, donde un alumno ingresó con una pistola de diábolos,  es una señal de alerta para que en las escuelas se implementen acciones preventivas como la llamada operación mochila.

Subrayó que los papás de los niños deben romper con la apatía que en ocasiones muestran cuando se trata de asuntos escolares, y necesitan estar conscientes de que en materia de prevención  la primera responsabilidad es de ellos y en la escuela se complementan dichas medidas.

“En primer lugar los padres somos quienes debemos revisar las mochilas de los hijos, porque nadie tiene mayor responsabilidad en nuestros hijos  que nosotros mismos”.

Aunque aclaró que el  alumno jamás accionó el arma, señaló que de lo que se trata es de prevenir a que ocurra algo lamentable y por ello las escuelas tendrían que tomar cartas en el asunto.

En su opinión es importante que los padres, en los hogares, revisen las mochilas de sus hijos pero también que accedan a que en los planteles les revisen las bolsas escolares.

“Yo les pediría a los padres que tuvieran voluntad en aceptar porque es para beneficio a sus hijos y no afecta sus derechos humanos ni su privacidad, porque se protege el bien  general, no solo de alumnos sino también de maestros; en el caso del que hablamos, por fortuna no ocurrió nada, pero qué tal si hubiera ocurrido”.

En el caso particular del estudiante de la  Altaír Tejeda de  Tamez, consideró que esa conducta de riesgo  amerita una sanción, como pudiera ser una suspensión temporal, sin embargo más allá de ese castigo disciplinario lo más importante es que los padres del menor asuman su responsabilidad frente a los hechos y sobre todo propicien el diálogo con el alumno.

“Creo que debe aplicarse no solo la suspensión del niño como un castigo, es más importante hablar con él, que estén conscientes de que el error viene de casa, de que hay que estar en constante comunicación con los hijos. El alumno debe decir porqué llevó el arma”.