Por Felipe Martínez Chávez
Cd. Victoria, Tamaulipas.- A más de cinco años de haber abandonado el penal, exonerado, José Francisco Chavira Martínez rompe el silencio: No le guarda rencor a su “secuestrador”, Egidio Torre Cantú.
Sabe perdonar a quien lo mandó a la cárcel, pero no olvida. Espera que un día el largo brazo de la ley alcance al ex gobernador de Tamaulipas.
Se perdonaron los dos. Antes de abandonar el módulo tres del Cedes de Tamatán, Torre le mandó ofrecer disculpas a través de personeros. Le echó la culpa al entonces poderoso secretario General de Gobierno, Morelos Jaime Canseco González.
Afirma Chavira que no se conocen, no fue un asunto personal sino político, una persecución. Tampoco conoció -ni conoce- ni tuvo tratos con los ex gobernadores Eugenio Hernández Flores, Tomás Yarrington Ruvalcaba y Manuel Cavazos Lerma.
En uno de sus negocios de venta de alimentos, el ex candidato independiente a la gubernatura atiende a personas y grupos. Es muy solicitado. Pareciera candidato a diputado, como dicen.
Formado en las escaramuzas de la manifestación y protesta callejera, hilvana rápido sus respuestas a las preguntas.
Fue detenido por la Procuraduría de Justicia del Estado el 5 de enero del 2012, en Altamira, en el desarrollo de una conferencia de prensa. Hacía precampaña por una candidatura al Senado por las siglas del PRD, entonces su partido.
Los delitos: Lesiones, robo de vehículos, privación ilegal de la libertad en agravio de Jorge Osvaldo Valdez Vargas y otros perredistas, integrantes de un grupo antagónico, en hechos que habrían sucedido en marzo del 2008 en la renovación de la dirigencia estatal.
Quedó libre el 22 de septiembre del mismo 2012 tras lograr el amparo de la justicia federal y que su caso llegara a la tribuna del Senado de la República.
Se autodefine, más que preso político, como un “preso de conciencia” del gobierno de Egidio Torre Cantú.
-¿Tuvo diferencias con él antes que llegar a gobernador?
-No lo conocía. Sabía de él como constructor favorito con su empresa Tohesa, en el período de Eugenio, Tomás y Cavazos. Hice la investigación. Yo soy crítico, un ciudadano crítico, digo las cosas sin capuchas, sin armas. Hago una protesta, exhibo una lona, pancartas, hago la denuncia pública con mi nombre, no me escondo.
Entonces, a eso no estaba acostumbrado el señor Torre. Él estaba ocupado en lavar dinero con obras infladas y luego mandar dinero a Estados Unidos. Tenía contratos en los tres niveles de gobierno pero nunca hacían un cuartito, o una casa de Infonavit. Pura obra oficial.
Pisamos cayos no solo de Egidio y sus compinches, su grupo de delincuentes. Le llaman clase política pero en realidad son parte de la delincuencia organizada, son los jefes de jefes que le llamo yo, capos de capos.
-Formal o informal ¿Mantuvo entrevistas él?
-No los conozco, no conozco a Egidio en persona. A Eugenio, a Tomás y a Cavazos, no los conozco.
-¿No hubo trato con ellos?
-No. Nunca, jamás. Incluso ni me interesa porque mis empresas se dedican a dar servicio al púbico, no al gobierno. Yo me dedico a la educación desde 1989. No tengo, no dependo de ellos y, cuando criticaba, me decían: oye, te van a quitar los clientes, que de proveedor. Pero no soy proveedor de nada.
SALI DEL PENAL EL DIA Y A LA HORA QUE QUISE
Originario del municipio de El Mante pero radicado en Nuevo Laredo, José Francisco es un ave de tempestades. En un rato organiza un plantón o manifestación callejera en cualquier parte de Tamaulipas.
En la ciudad fronteriza fue regidor por el PRD, única elección popular en su currículum.
-Se decía preso político de Torre ¿Lo sigue considerando?
-Sí. Preso de conciencia le llamamos, que es todavía más profundo. La diferencia que tuve con Egidio fue política, no personal. En realidad fue un secuestro legal que viví. El tiempo me dio la razón. Egidio también lo reconoció, pidió disculpas, me mandó pedir disculpas.
-¿A usted? ¿A través de otros?
-De un enviado del gobierno. Salí sin abogados. Mis abogados ni se enteraron, no estaban en la ciudad. Salí el día que yo quise, un sábado, a la hora que quise, a las doce. Estaba defendiendo a presos políticos como los de la APPO (de Oaxaca). A uno lo trajeron a Matamoros, al Cefereso, y me tocó atenderlo desde que llegó, y sacarlo. Nos lo iban a entregar a las tres de la tarde y fue hasta las dos de la mañana, cuando ya no había medios de comunicación ni gente. Me quedó esa experiencia.
-Usted ¿Salió a las doce de la noche?
-No, a las doce del día. Yo les dije: No somos delincuentes, si no, no salgo. Salgo a la hora que yo diga y el día que yo diga.
Me dicen: Ya queremos que salgas mañana martes. Contesté que no porque tenía cosas qué hacer. Tenía actividades de deportes.
-¿Adentro del penal?
-Sí. Aparte faltaba un punto de acuerdo en el Senado exigiendo mi libertad. Estaba dentro de la agenda de varios senadores del PRD, PT y Movimiento Ciudadano. Exhortaron al gobierno de Egidio Torre un jueves, dos días antes que yo saliera. Entonces tenía que esperar, no podía salir antes del punto de acuerdo. Por eso yo puse las condiciones. Salí limpio.
-¿Absuelto?
-Nada más con un disculpe usted. Sigo exigiendo y denunciando que se castigue esa impunidad.
-¿Qué exige Francisco Chavira?
-Mi demanda en contra del Estado por reparación de daño moral.
-¿Ya la presentó?
-Estamos en tiempo para hacerla. Los abogados están trabajando. Fue un daño moral que me causaron a mí y a mi familia. Tiene que haber una reparación, obligadamente. Viene la reparación del daño y castigo a ese grupo de delincuentes. Él, Egidio, le echó la culpa a Morelos Canseco (secretario General de Gobierno).
EL PENAL, LO QUE NUNCA OLVIDARA EN SU VIDA
Francisco Chavira Martínez tiene muy presente, y no olvidará para el resto de su vida, el tiempo que estuvo en el reclusorio de Tamatán.
-Ocho meses, 17 días, 12 horas y 20 minutos.
-¿Rencores?
– Ninguno. El rencor, si lo guardas dentro, te pudre el alma. Por eso jamás debes guardar rencores, tienes que ser feliz.
-¿Le da el perdón?
-Perdono, pero no olvido. Debe haber castigo. Se tiene que castigar y no vamos a descansar hasta que pague ese señor y todos los que estuvieron coludidos, el juez y el fiscal que inventaron toda una historia.
-Presentó en la PGR denuncia de hechos en contra del ex gobernador ¿Ha progresado?
-Ahí está la denuncia.
-¿La ratificó?
-Todo, con evidencia. Esperamos que en los próximos días salga la orden de aprehensión contra Egidio. Pero no solamente es esa. Creo que es la que menos le debe preocupar. Hay otras que le sacó el estado por millones de pesos.
-¿Por la casa de San Pedro? (en Nuevo León).
-La investigación por la casa de Garza García, cierto. La Casa Blanca de la Gaviota viene a ser una casa de muñecas o del Infonavit comparada con la de Egidio Torre.
-Usted levantó firmas y pruebas en contra de Torre ¿Le llegó algo extraordinario?
– No creo que sea brujo ni adivino pero mira cómo andan. Hay investigaciones y denuncias en contra de él.
-¿Lo ve preso?
– Es cuestión de las autoridades. Para qué me meto en broncas. El Estado ya los trae de pechito y con toda la evidencia. Que sean ellas, es su obligación.
MENTADAS Y CALIFICATIVOS DE RAJON
Acepta Chavira que, sumarse a la campaña a favor de Francisco García Cabeza de Vaca antes de las elecciones por la gubernatura, en el 2016, le restó credibilidad como independiente, pero afrontó las consecuencias.
-¿Por qué la decisión?
– Tienen razón, y quiero decir que… no hay que sacarle a este tipo de preguntas. Cuando declinamos y nos sumamos al proyecto de Cabeza de Vaca hubo seguidores genuinos y auténticos que de rajón no nos bajaron, no nos bajan de traidores al movimiento independiente.
Otros nos dejaron de hablar y hasta mentadas de madre recibimos. Hicimos alianza con él, con el candidato, no con el PAN. La alianza fue con la persona, la hicimos de frente, de cara, sin capucha, no nos escondimos, no dudamos.
Cuando votamos fuimos los primeros que mostramos el dedo. Después del triunfo salen los agachados que dicen que lo apoyaron por debajo del agua. Son los que escondieron el dedo y votaron por otro partido y dicen ahora que sufragaron por él, que son grandes amigos. Es la clase política lambiscona de otros partidos que busca seguirse manteniendo en el poder.
Sí tuvo un costo político para mí, grande por cierto, pero sin embargo asumimos ese costo porque lo hicimos por Tamaulipas, por sacar a un partido que hizo mucho daño y dejó al Estado bajo bala, en un charco de sangre. Egidio Torre Cantú y sus antecesores dejaron un Tamaulipas en agonía.
-Ahora ¿Está en receso político?
-Somos entes políticos por naturaleza. Uno está participando en todos los procesos electorales como candidatos o sin ser candidatos.
-Anunció que sería independiente a la Presidencia de la República ¿Qué le pasó?
-Realizamos congresos en los estados con la finalidad de impulsar candidaturas independientes. Cuando vemos precisamente el boom que despertó con más de 80 candidatos a la Presidencia, decidimos que el objetivo estaba cumplido.
En los próximos días, vamos a salir con spots precisamente para participar, para apoyar o exhibir al partido o partidos que le han hecho daño al pueblo. Vamos a hacer una campaña nacional, a recorrer los estados también.
-¿Para votar por quién?
-Primero a concientizar y enfocar en la estadística, en los hechos, quiénes le han hecho daño al país y en qué. Ya por junio, decidiremos a quién es al que vamos a apoyar.
-Decía usted que buscaría la Presidencia pero, si participaba Carlos Slim de candidato, se retiraba ¿Por qué? ¿Es su amigo?
-Lo veíamos como un empresario. El país no necesita ya la clase de políticos que vivan del erario, que se han convertido en una carga para los ciudadanos. Estamos convencidos que una persona que trabaja, que tiene su empresa y sabe administrar, no tiene necesidad de robar. El que no tiene nada viene con hambre.
-Para julio ¿Algún proyecto para alcaldías?
-Apoyar a todos aquellos candidatos que nos lo pidan.
-¿A quién ve como Presidente de México a partir de diciembre?.
-Ya sabes quién… para qué te digo si ya sabes quién. O puede ser el niño maravilla, o el viejo del caballo, pero al señor Meado no lo veo en nada.
-En este panorama ¿Hay Francisco Chavira para rato?
-50 años nada más. Dentro de 50 años nos jubilamos y ya no vamos a participar.
Y Chavira sigue atendiendo comisiones que lo solicitan, entre ellas las del Partido del Trabajo. No quiere ni será candidato para los comicios del uno de julio.
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