Fernando Acuña Piñeiro
Cd. Victoria, Tamaulipas.- Cuando una persona rodea su función pública de misterios, empiezan a crearse mitos sobre el papel que juega en el ámbito donde se desempeña. Cuanto más secreto, mas fascinante y enigmático, casi rondando el misticismo.
Es el caso de un personaje que arribó con el triunfo del cabecismo, en el 2016, y posteriormente, a lo largo de estos dos años, algunos comentaristas han contribuido a recrearlo en su imponente glamour de consejero ejecutivo, elevándolo por momentos a la categoría de un cardenal Richelieu, (el astuto estadista de la monarquía francesa, que igual fraternizaba con los católicos, que con los protestantes), o bien compararlo con el célebre monje de los tiempos zaristas, Gregorio Rasputín, que llegó a controlar el destino de la monarquía Romanov. Pero….
¿Quién es Cuitláhuac Bardán Esquivel?
Es un abogado egresado de la Escuela Superior de Leyes y Negocios, una universidad privada con presencia en diversos estados del país. Su perfil profesional, posiblemente le sirvió de algo, hace 18 años, cuando sufrió un lamentable accidente automovilístico, en su modesto coche Chevrolet Malibú, (hoy ha mejorado mucho su nivel económico), en el periférico capitalino.
En el peritaje, se dijo que las bolsas de aire no funcionaron, y esto motivó una querella del afectado, ante el equipo jurídico de la trasnacional. Desde entonces, la columna vertebral de Bardán quedó dañada, (o al menos eso fue lo que se argumentó, para poner en jaque mate a su contraparte).
Pero este problema de su estructura ósea, no fue obstáculo, para que el asesor, cuyo apellido paterno es de origen sirio, se moviese hábilmente en las alturas del sistema político. Uno de sus logros claves que lo catapultaron en sus relaciones de poder, a lo largo de la primera década de la era 2000, fue su participación, como colaborador del área de estudios legislativos del senado, en los tiempos foxistas.
Un dato que pocos conocen, es la estrecha relación de amistad que CBE, mantiene hasta la fecha con el panista Roberto Gil Zuarth. Ello explica, en parte, su arribo al equipo cabecista, en el 2015, y su papel estratégico, en la campaña ganadora del 2016.
Dotado con una singular versatilidad pragmática, para ir de un lado a otro del espectro ideológico, en el 2006, justo cuando concluye el Foxiato, vemos a Bardán saltar hacia el gobierno del centro izquierdista Marcelo Ebrard Casaubón. Ahí se desempeñó como Coordinador Ejecutivo de Gabinetes.
Pero el evento que catapulta nacionalmente a CBE, es el que se ubica, años atrás, en la segunda mitad de los noventas, durante el complejo proceso de pacificación en Chiapas. Ahí Bardan, figura entre un selecto grupo de analistas y negociadores, encabezados por el psicólogo matamorense Marco Antonio Bernal Gutiérrez, dos veces fallido aspirante a la gubernatura de Tamaulipas.
En su libro, Crónica de una Negociación, Marco Bernal dedica unas líneas de agradecimiento, a los miembros de su equipo, dotados de una, “infatigable voluntad negociadora”, entre los que se encuentra Bardán Esquivel. Finalmente, los operadores zedillistas fracasaron, en su intención de meter al redil al EZLN.
Esta relación de Bernal con Cuitlahuac, dio pie para generar especulaciones, en el sentido de que, su llegada al sexenio panista en nuestro estado, fue una recomendación bernalista. Pero dicha especie es falsa. La llegada de Bardán, se da vía Gil Zuarth. Incluso en la actualidad, CBE está tratando de impulsar a Roberto Gil, hacia el liderazgo nacional del PAN, pero su propósito se asemeja a la actuación de Tom Cruise, en “Misión Imposible”.
Como bien se puede observar, en la radiografía de su andar por los entretelones del poder, Cuitlahuac Bardán, le ha servido igual a personajes de izquierda, de centro izquierda y de derecha como Vicente Fox. Lo cual quiere decir, que si en este momento, el régimen moreno del obradorismo desapareciera, y en su lugar, emergiese un gobierno de ultra derecha, Bardán estaría ahí.
Su capacidad de conservación y asimilación ante los cambios políticos, por más radicales que estos sean, es impresionante.
Pero…..¿cual es en estos momentos el papel que está jugando Bardán, como funcionario del gobierno panista que encabeza Francisco García Cabeza de Vaca en Tamaulipas? Hasta ahora, nadie ha dicho que haya renunciado, por lo cual se le sigue considerando pieza clave, en el cuarto de guerra institucional, que nunca ha dejado de funcionar.
Si hemos de ser acuciosos, el súper asesor cabecista ha tenido últimamente días difíciles:
Entre esos días aciagos, destacan los virulentos ataques del ex gobernador zacatecano Ricardo Monreal, por cierto, hoy convertido ya en el virtual líder del senado de la república. Monreal denunció, a través de dos videos, lo que calificó como una Elección de Estado en Tamaulipas. El político y académico, con un doctorado en derecho constitucional y administrativo por la UNAM, sabe de lo que habla, cuando menciona conceptos relacionados con la antidemocracia en nuestra entidad.
Otro descalabro para Bardán, quien por cierto hábilmente se cuidó de no aparecer, ni ser mencionado durante la campaña panista en Tamaulipas, fue la derrota del PAN-gobierno y de la mayoría de los candidatos a la diputación, más el naufragio del senado.
¿Qué ocurrió ahí con la estrategia? ¿Le falló a Cuitláhuac el pronóstico, o acaso recurrió a las verdades a medias, como la pitonisa de Delfos, que un día le predijo a un rey, ansioso por conquistar Persia: “Si cruzas el río Halys, destruirás un gran imperio”. El rey Creso se lanzó a la aventura de la conquista, pero fue derrotado, y el único imperio que se destruyó, fue el suyo propio?
De colofón, una pregunta:
¿Qué papel va a jugar Bardán, en las elecciones locales del 2019, en Tamaulipas? ¿En su calidad de súper asesor de los vientos, se enfrentará a la maquinaria morenista de López Obrador y de su antiguo jefe Marcelo Ebrard?
¿O bien, ha llegado el momento de lanzarse una vez más al gran trapecio ideológico, y regresar a la izquierda?
Discussion about this post