Felipe Martínez Chávez
Cd. Victoria, Tamaulipas.- A seis años de su registro como partido político, Morena parece estar en su peor momento. Siguen como perros y gatos. El domingo mal cumplieron con la agenda de renovación de su dirigencia.
Acusaciones van y vienen. La principal es que no hubo quórum en el consejo nacional y por tanto no tienen validez los acuerdos tomados. Las impugnaciones siguen ya su ruta.
Don Alejandro Rojas Díaz Durán, muy conocido en Tamaulipas porque afirma que “seré el próximo Gobernador”, anunció que presentará recursos ante los órganos internos y el TRIFE. Propone que la UNAM sea la que diseñe la metodología para realizar encuestas y debates entre los aspirantes a la jefatura.
No se sabe tampoco si el 23 y 24 del presente se realizarán tales encuestas que decidirán quién se hace cargo.
Rojas el “cargamaletas” no baja de “patito” la asamblea, de “cachirules” a los consejeros, y desconoce la comisión de encuestas nombrada que beneficiará a Bertha Luján, por incluir a una parienta suya.
Las distritales propuestas se suspendieron. Las de Tamaulipas serían el domingo. No se sabe para cuándo se harán.
Por estos rumbos no se le apuesta mucho al futuro del Partido de López Obrador y menos si, como lo dijo, renuncia en señal de protesta para que dejen de pelear.
Hay quienes hacen ya un recuento de la fuerza electoral morenista para los comicios del 2021 en esta tierra. Tiene una clientela asegurada sin necesidad de hacer campaña… Por ahora.
En 2018 AMLO conquistó 786 mil sufragios, muy por encima de los 475 mil de Acción Nacional, y a años luz de los 228 mil del PRI.
Una encuesta presuntamente realizada por Gallup arroja preferencias de la militancia: Alejandro Rojas 35 por ciento, Mario Delgado 33, Yeidckol Polevnsky con el 19 y Bertha Luján el 13 por ciento. Se habría entrevistado a tres mil 500 personas en 20 ciudades.
Si Morena gana algo en Tamaulipas en 2021 será por el voto cautivo, los beneficiarios de los programas del gobierno federal. Habiendo lana se crea una “barrera impenetrable”. Por lo demás andan muy desorganizados.
Más de 500 mil personas aterrizan con apoyos económicos mensuales, bimestrales o por ciclo, incluso “por adela” en esta época de virus, más aquellos que reciben servicios médicos.
Se habla de 28 programas que manejan 13 dependencias federales para sumar hasta un millón 700 mil personas, todos ciudadanos con credencial de votar en mano.
Los adultos mayores que cobran -ahora por adelantado- en SEBIEN suman 218 mil (el mes de julio), más 23 mil que residen fuera de la entidad o andan de mojados en el lado “gringo”. Son mil 310 devaluados pesos por mes.
Muy fácil de operar y el jefe del consulado federal por estas tierras, José Ramón Gómez Leal, lo sabe muy bien. Solo tiene que ir a pagar y se echa la gente a la bolsa.
Lo muy malo es que el muchacho no trabaja por Morena sino para “su santo”. Sigue de precampaña.
La beca universal para estudiantes de educación media superior suma 800 mensuales. Llega a 92 mil almas.
Hasta diciembre el padrón de “jóvenes escribiendo el futuro”, nivel superior, llegaba a siete mil 200. Son dos mil 400 pesillos por mes.
José Ramón ha creado una estructura que llega -ahora- a 20 mil apoyos de “producción para el bienestar” y amenaza con incrementar para cuando lleguen los comicios. Se paga por superficie de maíz y frijol: 1,600 pesos a los pequeños, un mil a los medianos y siete mil 300 a productores de caña de azúcar.
El programa La Escuela es Nuestra llega a más de mil centros educativos (para este 2020).
La “pensión a discapacitados permanentes” menores de 29 años beneficia a 18 mil 600 personas (datos a julio) con mil 275 pesos cada 30 días.
Si cambiamos de tema, el jefe estatal del PRI Tamaulipas, Edgardo Melhem Salinas, hace esfuerzos por sacar adelante la chamba aun con bajo presupuesto, pero sus colaboradores no le ayudan.
Uno de ellos es Erick Emilio Grimaldo Hernández, presidente del “Instituto Reyes Heroles”, quien en dos ocasiones -sin posibilidad alguna- ha levantado la mano para ocupar la mismísima presidencia estatal del partido. Es una vieja maniobra para “negociar” posiciones.
Pues bien, el jovenazo tiene el don de la ubicuidad. Desde el 2018 es el Director de Justicia Cotidiana de la Presidencia Municipal de Guadalupe, Nuevo León, donde labora de lunes a domingo al lado de la alcaldesa Cristina Díaz Salazar.
Es un orgullo que un güemense destaque en otras latitudes, pero ha engañado a militantes y jefes del partido, porque en las oficinas del bulevar Praxedis Balboa no se para desde que le entregaron el nombramiento hace dos años.
Tiene fama de trampa. Se dice egresado de la facultad de Ciencias Políticas, Universidad Autónoma de Nuevo León, pero su nombre no aparece en el Registro de Profesiones de la SEP. La única referencia es la de técnico en electricidad por el Cbetis 24, de ciudad Victoria, en el año dos mil.
Total que, con ese equipo, Melhem no estará en condiciones de avanzar mucho en el proceso eleccionario que está por llegar. Más le vale corregir fallas a tiempo.
Por cierto que, en las dos veces que ha “aspirado” a dirigir los destinos de los tricolores tamaulipecos, Grimaldo calificó al partido como “elitista y burocrático”. Llegó a decir que al Revolucionario le urgía una “neurocirugía” para reencausar camino.
Discussion about this post