Por Felipe Martínez Chávez
Cd. Victoria, Tamaulipas.- Con un mensaje de “línea dura”, el ahora alcalde con licencia de Río Bravo, Héctor Joel “Calabazo” Villegas González hizo su “presentación” como integrante del equipo de transición de Américo Villarreal Anaya.
Dijo que el gobierno de Cabeza de Vaca “busca entorpecer el proceso de entrega recepción, enturbiándolo, para que no veamos sus desviaciones”, que el pueblo no sepa las condiciones reales en las que entregan el Estado.
Junto a Jesús Lavín Santos y Tania Gisela Contreras, coordinador general y asesora jurídica de Villarreal, el riobravense manifestó que, “a pesar de la disposición y civilidad política” mostrada por el Gobernador Electo para efectos del cambio de poderes, lo que han encontrado son descalificaciones constantes y calumnias.
Agregó que “se dan ataques y deformaciones, despreciando la voluntad popular y el estado de Derecho en Tamaulipas”.
En círculos políticos, a Villegas se le menciona con insistencia como el futuro Secretario General de Gobierno, algo que cuidó de no confirmar a pregunta de los reporteros.
Hizo ver que AVA “tendió la mano” al gobierno que sale, con el único objetivo de realizar la transición que la ciudadanía merece, “pero no tuvimos la respuesta deseada”.
En contraparte, lo que hallaron los morenistas es “hostilidad, desinterés, falta de disposición y un evidente desprecio hacia las instituciones y el pueblo de Tamaulipas”.
“El Calabazo” llegó al comité de transición en lugar de Héctor Iván Reyes Herrera, su tesorero en Río Bravo, designado inicialmente mientras aquél rendía su primer informe de administración.
Abundó: “Lo que hemos recibido de la actual administración y del Gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca ha sido un doble discurso”.
Ejemplificó con lo dicho por el dirigente estatal panista, Luis René Cantú Galván y el propio hermano del Gobernador, Ismael, “de que la elección del 5 de junio tendrá que ser invalidada y se niegan a aceptar una derrota que no les propinamos nosotros sino el mismo pueblo de Tamaulipas”.
Luego que confirmaron que la decisión soberana del 5 de junio es irreversible, los panistas decidieron modificar ilegalmente la estructura del Secretariado del Sistema Estatal de Seguridad Pública, transfiriendo atribuciones a la Fiscalía General de Justicia, “con el único objetivo de entorpecer el ejercicio de la nueva administración”.
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