Felipe Martínez Chávez
Cd. Victoria, Tamaulipas.- El problema (social) comenzó en marzo de 1994, hace más de 23 años. De la noche a la mañana llegaron a Victoria dos individuos que se identificaron como Antonio Tirado Patiño y Alfredo Loredo Zárate.
Arribaron en avión y se hospedaron en los mejores hoteles. Se dijeron representantes de la Unión Campesina Democrática, y que venían a integrar una delegación de ese organismo para tratar el tema de los autos chuecos.
En esta capital difundieron publicidad por radio. Cobraban por la «inscripción» 150 mil pesos (de los viejos), y anunciaron que se reunirían cada ocho días en el l7 Hidalgo para presionar a las autoridades hacendarias a una nacionalización de vehículos.
El 11 de abril (de ese año) apareció una muchachita que dijo llamarse Elsa Rocha Cázares. Se identificó como “miembro de la dirigencia de la UCD» y quedaba como jefa local.
Habló de un decreto de nacionalización aparecido el domingo 10 de abril en el DOF. Según sus palabras, se permitía la nacionalización hasta los modelos 1986 para atrás. Incluso habló de una «rifa» de qué unidades entrarían en el programa.
La verdad es que el Diario no se elabora ni sábados ni domingos.
Desde entonces la gente sigue esperando la anunciada nacionalización.
Por las arcas de la organización han pasado muchos millones de pesos. Miles de propietarios han sido engañados.
La mitad de los millones, como decía Elsa, se mandan a los jefes nacionales en la hoy CDMX.
Surgieron otros representantes, Javier Cázares Perales, Eliseo Pérez Reyes y Angélica Carrizales Serrato.
El primero se retiró porque dijo que “no hubo cuentas claras”; Pérez se pasó a lo que hoy es la ONAPPAFA -que hace lo mismo- y, de Angélica, se le perdió el rastro.
Por esas fechas llegó también la Organización Nacional para la Protección del Patrimonio Familiar. Comenzaron a pelear por el “mercado” de afiliación de dueños de vehículos “chuecos”.
El representante de la CNC, Vito Alessio Álvarez Rodríguez, anunciaba que elaborarían una lista de americanos, pero «sin cobrar un solo cinco».
Pasaron los años y nadie fue capaz de detener a los defraudadores. Se quedaron y crecieron con ingresos millonarios. Comenzaron a vender calcomanías de “asociado”.
Más tarde extendieron el negocio a las placas de circulación. Ya ejercían funciones de un gobierno estatal o de la CDMX. Nadie los paró en el curso de casi 25 años. Todo al margen de la Ley.
Como sucede en estos casos, cuando están en la ilegalidad, vinieron los pleitos por las utilidades. Son varias las “representaciones” y sigue la disputa por los “clientes”. Se sabe que en Tamaulipas hay dos UCDS y hasta tres Onappafas. Promueven sus “ventas” en los medios de comunicación.
A pesar de las protestas de agencias de autos nacionales, la autoridad legal, el Gobierno del Estado, había permanecido con los brazos cruzados y hasta se sospecha de connivencia.
Hoy, surge la intención del Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca de meter en orden a esas organizaciones, a sus líderes, que han tomado facultades que no les corresponden. Son tiempos de cárcel.
Si las autoridades hacendarias hacen pagar placas cada dos años, estas organizaciones lo hacen cada año, y cobran mas.
También cobran cambios de propietario y “bajas”. De paso expiden “seguros” como si se tratara de instituciones autorizadas. A tanto han llegado ante la mirada omisa del gobierno.
Al rato van a expedir licencias de conducir.
Se hacen llamar AC (Asociaciones Civiles) sin que haya prueba de que lo sean.
Solo hay un dato de legalidad.
El dos de mayo del 2015 el entonces gerente de la Unión Campesina Democrática, Jaime Gauna Cervantes, registró ante el Instituto Registral y Catastral de Tamaulipas tales siglas con el agregado de “servicio para la comunidad”. Escrituró el notario Héctor Luis Tejeda Ramírez.
Gauna se dio de alta en la secretaría de Hacienda, UCD1505021P8, para expedir facturas y pagar impuestos.
Sin embargo, en el pleito que se traen por los dineros, este 16 de noviembre del 2017 quienes se quedaron con la organización solicitaron modificaciones a la escritura constitutiva.
En nuestros días hay tantos grupos que pelean la lana de los dueños de vehículos “chocolates”, que ya no se sabe quién representa a la auténticas AC. De todas maneras incurre en delitos al expedir placas.
Desde estas líneas felicitamos al Gobernador Cabeza de Vaca y al ejecutor de las instrucciones, Arturo Soto Alemán, jefe de Ingresos en Finanzas, por las medidas que empiezan a implementar. Son tiempos de meter orden.
Por cierto, para este lunes está anunciada la presencia del Gobernador para presidir el desfile del 20 de noviembre en El Mante.
Es día festivo, no hay labores en las instancias públicas. Solo Comapa Victoria, que comanda Gustavo Rivera Rodríguez, difunde que su gente estará al pie del cañón en matriz y sucursales.
Tampoco tiene libre el alcalde de Güémez, Carlos Cárdenas González. El mismo día del inicio de la Revolución Mexicana cumplen años los Ejidos San José de las Flores y Guadalupe Victoria. Como siempre lo hace, habrá de llevar beneficios a las comunidades y asistir a los eventos.
“Gracias a que contamos con finanzas sanas, nos da la oportunidad de apoyar a los ejidos que celebran un aniversario más de haberse conformado”, dijo el Presidente.
Dos días después, el 22, es el “cumple” de El Arco.
Que Don Xicoténcatl González Uresti, director del Hospital General, será el candidato PAN-PRD-MC a la alcaldía capitalina. Sus representantes ya andan por las colonias organizando a la gente.
Y en precampaña Doña Andrea García García, del PAN, quien cobra como Senadora. Que también quiere administrar la Ciudad de las Cotorras.
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